A bordo de un Maverick clásico, Jorge Díaz Estrada entraba por la puerta del estacionamiento de la S15 saludando de manera sobria a Don Wences con su cajetilla de Marlboro rojos en mano, eran los años ochenta.
Siempre de los primeros en llegar para supervisar la formación de los alumnos antes de entrar a clase, el profesor de las materias de Física y Quimica sentenciaba iracundo a todo aquél que no guardara la compostura o prestara atención a una instrucción.
Chamarra negra en piel, jeans y sus legendarios Ray Ban eran su atuendo habitual aún para las ceremonias de mayor sobriedad, todo un personaje que bautizaron con el mote de "El Cobra" en los años noventa.
Detrás de su mirada retadora y aspecto soberbio, se encontraba una persona de buen sentido del humor y un gran carisma; exigente pero paciente con sus alumnos, no pasaba al siguiente tema del programa de clase hasta que todos en el grupo hayan comprendido la clase anterior.
Atento al comportamiento de sus alumnos, un día nos sorprendió a varios de nosotros jugando a ser grandes: Jorge Casanova había llevado unas botellitas de licor de café para "celebrar" las vacaciones de semana Santa, al poco rato el autor de esa ingeniosa idea estaba acompañado de Noel González, Oscar Vargas, Lalo Pérez y el que escribe frente al Prof. Genaro García Becerril.
Ni el regaño del Director ni de mis papás fue tan útil y significativo como el del Prof. Díaz Estrada.
El próximo 1 de Noviembre es su retiro como docente del histórico plantel, sus alumnos de más de 20 generaciones le despedimos con gratitud y alegría de saber que su paso por la Secundaria 15, es una leyenda más de la mística que distingue a nuestra escuela.
Gracias por todo profe.
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