Brincos y relatos de un Aprendiz de Ilusionista

Añorando una de las mejores épocas de mi vida, encontré dentro del mar infinito de la red el sitio Web de un tal Alberto Mastache, en donde entre muchas cosas, tenía un apartado dedicado a la Secundaria 15; de eso hace ya algunos años, cuando el Blog que se conoce en la actualidad no se tenía ni imaginado por su autor.

Hijo de quien fuera el segundo Director en la historia de la S15, Prof. Jesús Mastache Román, Alberto era también un orgulloso Ex15 de la Gen 56-58 y jocoso aseguraba haber sido traído a este mundo por el cartero y no por la cigüeña (Había nacido un 12 de Noviembre: Día del empleado postal).

Así pues y luego de un par de años volví a contactar Alberto, esta vez con el asombro vivaz de encontrar en la Web un sitio de encuentro de todas las generaciones que han pasado por nuestra escuela. Fue una grata sorpresa encontrar en una puntal y equilibrada convergencia la participación de distintas generaciones que compartían sus experiencias en la S15.

Alberto nunca imaginó el impacto de esta labor, ya que consolidado como el puente de más de 60 generaciones prefería evadir el reconocimiento y la trascendencia de su trabajo con una sonrisa adusta y un tanto simplona: “Me choca el protagonismo...” decía; aunque no perdía oportunidad de presumir sus distancias record en natación.

En su trato se distinguían los principios del Manual de Carreño, aunque ya en confianza recurría a un lenguaje más urbano sin perder la línea de caballerosidad. De fundadas ideas luteranas también se autodeclaraba como un irredimible anarquista, sin olvidar nunca sus valores morales.

Disfrutó como un niño en una mañana de Navidad la celebración del 60 Aniversario de la S15 y como tal terminó felizmente satisfecho y vencido de cansancio al final de ese día.

Inventaba tiempo para todo, su jovial vitalidad contagiaba, era incansable en la búsqueda de sus sueños. Su implacable dinamismo y sed de aprendizaje lo llevo a estudiar 2 carreras profesionales y un insaciable gusto por distintas artes.

En lo personal puedo asegurar que nuestra amistad fue breve pero trascendental, y que nuestra brecha generacional no fue más que un punto de referencia entre nuestras experiencias y expectativas.

Vaticinando con conciencia lo que se veía venir, hace unos meses platicamos sobre la inevitable ausencia de seres queridos y sus polarizados efectos, ya que la sensible partida de la maestra Garfias coincidía con el nacimiento de mi primer bebé y su segundo nieto; sin duda el arribo y despedida de este mundo terreno fue un tema que llamó a la reflexión a un Aprendiz de Ilusionista e improvisado Mago de los Sueños.

Aunque no tuvimos oportunidad de vernos este año, la despedida no fue necesaria para ambos, ya que nos era sabido el cariño y admiración que sentíamos uno del otro; aunque no dejo de reconocer que se le extraña demasiado.

Esperando volverte a encontrar en el camino querido amigo, seguirás pasando lista de presente entre nosotros… tu familia Ex15.

Alejandro Ramírez G